NARRADOR Tendríamos menos historias que compartir, menos supervivientes de quienes aprender, si no fuera por el extraordinario valor de ciertas personas comunes: los rescatistas. En los casos más raros, una nación entera podía unirse, como aprendimos con el pueblo de la Dinamarca ocupada por los alemanes. Sin embargo, fueron más comunes los esfuerzos de rescate de personas que actuaron completamente por su cuenta, utilizando los recursos disponibles para ayudar a otros a sobrevivir. Varios diplomáticos valientes utilizaron su estatus especial para salvar a decenas de miles de judíos de la deportación, en la mayoría de los casos, contra las órdenes de sus superiores y arriesgando su propia seguridad. Chiune Sugihara, de Japón, podría haber estado hablando por todos ellos cuando dijo: VOZ DE PERSONAJE—MASCULINA Después de mucha lucha y tormento, finalmente llegué a la conclusión de que la humanidad y la compasión son lo primero. Arriesgué mi carrera y ejecuté debidamente mi misión sin dudarlo. Confío, incluso ahora, en que hice lo correcto. NARRADOR Sus esfuerzos salvaron a la familia de la superviviente Edith Hamer. VOZ FEMENINO “Para 1940, la situación era desesperante y, de algún modo, se enteraron de que en Kovno había un hombre, un abogado japonés de Lituania llamado Chiune Sugihara, y se enteraron de que entregaba visas, visas de salida. Había que obtener visas de salida para salir de Lituania, así como una visa para ingresar a otro país. […] El 24 de julio de 1940, recibieron una visa de salida de Chiune Sugihara. Mi padre recibió la visa de salida número 7; mi madre recibió la visa de salida número 8 y yo era una niña con el pasaporte de mi madre”. NARRADOR Otra rescatista, Hannah Szenes, se lanzó en paracaídas en territorio nazi para ayudar a la resistencia judía. Después de que fue capturada, torturada y asesinada, se encontró un poema en su celda de la prisión: VOZ DE PERSONAJE FEMENINO Podría haber cumplido 23 en julio; Aposté por lo que más importaba, Se lanzaron los dados. Yo perdí. NARRADOR Como Hannah Szenes, Irena Sendler trabajó para respaldar los esfuerzos de la resistencia; sin embargo, lo hizo en el gueto de Varsovia, rescatando a 2,500 niños y escondiéndolos en orfanatos. También fue capturada y torturada horriblemente, sin embargo, fue rescatada por sus aliados de la resistencia. Además de salvar al menos a 2,000 refugiados, el periodista estadounidense Varian Fry usó el poder de su pluma para que Estados Unidos, aún neutral, le prestara atención a la catástrofe de Europa. Cada uno de esos rescatistas —y los muchos cuyos nombres nunca se sabrán— puso sus creencias en acción, con el espíritu del defensor.